¿Puede una endodoncia salvar un diente?

Cuando un diente presenta una gran caries o destrucción (producida por traumatismos o fracturas, por ejemplo) que afectan a la pulpa del diente (conocida coloquialmente como “nervio”), solo existen dos posibilidades: extraer el diente o realizar un tratamiento de endodoncia. La endodoncia es necesaria cuando la pulpa o nervio se inflama o se infecta. En los casos en que la pulpitis o inflamación de la pulpa dentaria es irreversible, la única opción es la endodoncia, es decir, la extirpación total de la pulpa y la consiguiente obturación del conducto dentario.

En determinadas patologías, la endodoncia es efectivamente la única manera de salvar un diente. Si no se realiza a tiempo puede producir mucho dolor e incluso provocar una infección severa de los tejidos que rodean el diente.

Una endodoncia consiste en eliminar la pulpa dentaria, limpiar el interior del diente y finalmente sellarlo. Para practicarla, se aplica anestesia local al paciente y se procede a abrir el canal pulpar (espacio que ocupa dentro del diente) mediante una fresa específica, para tener un buen acceso a su interior. A continuación realizamos un limado del interior del conducto radicular para retirar los restos de tejido vasculonervioso afectado hasta el final de la raíz. Procedemos entonces a desinfectarlo mediante diferentes productos químicos, y finalmente lo sellamos con cemento y material de relleno (un material plástico llamado gutapercha), para evitar futuras infecciones.

En algunas ocasiones, tras el tratamiento es necesario tomar un antibiótico específico, para mejorar la desinfección de la zona alrededor de la raíz, así como medicación analgésica o antiinflamatoria.

Por supuesto, tal y como siempre defendemos desde Clínica Dental Luciano Badanelli, lo más recomendable es mantener los dientes propios siempre que sea posible. Esto es sin duda mejor que extraerlos y tener que reponerlos con prótesis fijas o implantes. Por eso siempre recomendamos que cuides de tu higiene bucodental al máximo para mantener tus dientes en un estado óptimo. Pero para los casos en que no queda más remedio que recurrir a una endodoncia para salvar tus piezas, te informamos de que la endodoncia es un tratamiento seguro y con un índice de éxito superior al 95%, y es la única manera de mantener los dientes en las situaciones anteriormente descritas.

Si crees que puedes necesitar una endodoncia, no dejes pasar más tiempo y concierta ya tu visita para que uno de nuestros especialistas diagnostique tu caso. Puedes pedir tu cita en el 915042002 o acercándote a nuestras instalaciones, en la calle Jesús Aprendiz, 6 – portal 2 – Bajo A de Madrid, dentro del barrio Niño Jesús y muy cerca del Parque del Retiro.

Actúa cuanto antes y no pongas en peligro tu boca.

Dr. Javier González López
Endodoncia y Odontología Conservadora